Discurso 11/2013
13 de diciembre de 2013
Antes que nada, y era parte de lo que queremos ir posicionando desde esta Comisión, que cuando haya temas de coyuntura que implica una posible concurrencia de derechos y las necesidades que tienen las autoridades de emitir actos al respecto, es que no se dejen de atender todas y cada una de las situaciones que implica regular.
De entrada, nosotros consideramos que no es necesaria la legislación punitiva en materia de manifestaciones. Nosotros estamos postulando el modelo integral, ustedes lo tienen en parte el documento y se justifica con todos los argumentos, que tiene más un enfoque de prevención y atención basada en derechos humanos, una buena interlocución entre autoridades, una buena comunicación y anticipación de escenarios propicia que no haya las violaciones o no haya la colisión de derechos.
Las medidas preventivas se pueden manejar incluso administrativamente desde la regulación a la autoridad, no a las personas, en esta materia. La situación también del ejercicio de la libertad de expresión, reunión y manifestación que son derechos adquiridos, y en materia de libertad de expresión no vamos a dar un paso atrás cuando se pretenda regular contenidos, la libertad de expresión es un derecho adquirido; constitucional e internacionalmente está establecido que las responsabilidades podrán ser posteriores, nunca la regulación previa porque eso es censura, y más cuando vemos las tentaciones de regular incluso ahora el pensamiento, un acto interno, no sé el psiquismo de la autoridad a dónde nos pueda llevar, porque el pensamiento es más que un acto ganado desde 1789 y en 2013 lo seguiremos garantizando.
En la materia de las conclusiones que tenemos como parte de este estudio, vemos que el desarrollo de marchas y manifestaciones públicas supone un mecanismo de participación social para el ejercicio de derechos fundamentales, específicamente de los de libre reunión, libre manifestación y protesta social.
En este sentido resulta fundamental que en una sociedad democrática existan mecanismos institucionales de participación que aseguren que las demandas de las personas sean atendidas por parte de las autoridades.
Finalmente, la manifestación, la reunión, la asociación que se hace con cualquiera de los fines a que tenemos derecho en una sociedad democrática, devienen precisamente de tener que mejorar los mecanismos de acercamiento a la autoridad cuando se tienen que tomar decisiones.
En la medida en que se fortalezcan esos mecanismos de participación, no será necesario que se tenga que cerrar una vialidad, generar un mitin, porque hay otras formas de participación ciudadana y vemos que esa es una de las mejores opciones preventivas en materia de estos fenómenos.
Si bien es cierto que el desarrollo de marchas y manifestaciones pueden generar molestias y entrar en conflictos con el derecho a la movilidad, también lo es que dicho conflicto no se plantea de manera directa, pues la problemática general de movilidad deriva en la ausencia de política integral, las marchas representan sólo una mínima parte de dicha problemática.
Vivimos en una sociedad compleja, justo el día de ayer en la libertad de cultos, tenemos una de las manifestaciones de movilidad más interesantes en nuestra capital; las peregrinaciones. Quién acompaña, quién verifica, para efectos de que haya un acompañamiento adecuado y no haya situaciones incluso de accidentes cuando se dan esas peregrinaciones, es una manifestación más.
Vemos las situación incluso de cuando tienen las cuestiones de celebrar que ganó un equipo de fútbol, o el hecho de una Feria, hay una complejidad en lo que implica la movilidad.
Entonces no dejar de lado, porque cuando se pretende regular se regula de manera general, y una declaración que se haga por la autoridad en una Ley acota todas las demás posibilidades.
Queremos poner en atención a la sociedad, que vean todas las posibilidades que tiene la movilidad en la capital, para que no se dejen de atender todas y cada una, porque se regula una y pudieran quedar impactadas todas las demás, y el presente estudio permite que podamos afirmar que no es necesaria una regulación hacia las personas por parte de manifestaciones o protestas. Puede haber mecanismos de mejor articulación de las autoridad que finalmente son las que tienen la obligación de garantizarnos a todas y todos nuestros derechos.
Justo aquí en la Comisión, y nos lo reconocieron los propios empresarios, personas de los comercios que se han visto en su momento afectados por las manifestaciones o mítines, nos reunimos con ellos aquí en la Comisión, nos reconocieron que era la primera vez que había este acercamiento, esta Comisión ayuda a todas y todos, y sabemos que ahí también hay un fenómeno sensible de afectación a sus derechos, tenemos las quejas abiertas aquí en la Comisión que se están documentando, y la omisión de la autoridad en dejar de establecer mecanismos eficaces de interlocución para evitar las manifestaciones, o la omisión de la autoridad en dejar de generar plataformas que abonen a que haya una menor afectación a las personas es lo que genera en este caso, una posible violación de derechos humanos.
No es que los particulares tengan que colisionar, no es que un derecho se anule por el ejercicio de otro, es generar las condiciones de armonización que sí se pueden dar con las medidas preventivas. Nos llama la atención, incluso en las regulaciones que se están plasmando, todas tienen tendencia punitiva o abolicionista, no tienen una tendencia integral; no porque en otros países se haya regulado quiere decir que es una plataforma en beneficio de los derechos humanos, que exista no solamente se tiene que copiar, porque lo que estamos viendo en otros países es que se están restringiendo los derechos, y los derechos no se deben limitar en Ley, los derechos se deben armonizar en los ejercicios y son las autoridades las que tienen las responsabilidad, pero no regulando, limitando los derechos, sino regulándose, propiciando que los derechos existan.
En este caso, nosotros lo que estamos poniendo sobre la mesa es un diagnóstico integral con todas las voces, con todos los escenarios, con todas las preocupaciones de tender a solucionar legislando, la última forma de regulación debe ser la penal en una sociedad democrática, puede haber medidas graduales.
Esta Comisión está en contra de cualquier situación de violencia, la violencia no comunica, la responsabilidad se tiene que atender ante las autoridades, pero se debe de atender ante las autoridades con protocolos adecuados que no dañen derechos humanos, con un debido proceso, para que entonces quien sea un presunto responsable tenga entonces, la asignación de esa responsabilidad por las autoridades, y haya un debido derecho a la justicia de quienes se ven afectados cuando alguien en uso de sus derechos o violentando el derecho, tenga que responder en una sociedad democrática.
Nosotros abonamos hasta esa tendencia, nos preocupa las otras tendencias que van más a una regulación punitiva, nos preocupan las tendencias que incluso pudieran estar injiriendo competencias en la regulación, pero sobre todo esta Comisión estará muy atenta a las estrategias, en abonar al debate, al día de hoy afortunadamente no tenemos aprobada legislación publicada en la materia. Lo que nosotros queremos llamar la atención es cuando haya esa tendencia en cuanto a algún tipo de regulación, dar todos los insumos para que no se dejen de atender los derechos humanos que se pueden ver involucrados en esas regulaciones, eso es lo que estamos al día de hoy y estaremos muy, muy atentos y muy en las estrategias que se tengan que llevar a cabo, en una difusión sobre las preocupaciones, en una concientización, y ponemos a disposición de las autoridades a disposición de la propia sociedad para que conozca este documento, y vean cuáles son los riegos de regular por contextos, hay que regular con política pública con cuestión integral, y con una visión de derechos humanos, ahí seremos siempre aliados y seremos los primeros en aportar los insumos necesarios.
En esa materia estaremos muy atentos y este documento al día de hoy será público, para quien lo quiera utilizar, reflexionar, ver todo lo que implica; trae anexos que concentran también las preocupaciones del sector privado, viene el estudio comparado de legislaciones, viene lo que implica una regulación integral, y por supuesto hablar de integral no sólo se regula en la manifestación, sino en un adecuado y dignificación del trabajo de las autoridades y de la policía; mejor capacitación, mejores condiciones de trabajo y eso también abona a un mejor ejercicio en estas libertades.
Ese sería de nuestra parte y quedamos más que atentos para efectos de sus preguntas, y también les adelanto que este documento lo estaremos entregando en la propia Asamblea Legislativa del Distrito Federal, a los señores Diputados respetando su competencia federal, a los Senadores de igual manera, a la propia Jefatura de Gobierno del Distrito Federal, y es público para cualquiera que quiera tener insumos de reflexión integrales que es lo que abonamos para una verdadera defensa de derechos humanos. Gracias.