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Palabras de la Presidenta de la CDHDF, Doctora Perla Gómez Gallardo, durante la Presentación de Acciones de Supervisión en Unidades Médicas en Centros de Reclusión y el Centro de Sanciones Administrativas del Distrito Federal

Discurso 42/2015
14 de octubre de 2015

 

Buenos días. Saludo al Doctor Armando Ahued, Secretario de Salud de nuestra Ciudad; a nuestro Consejero Doctor José Antonio Caballero; a todas y a todos, al personal de la Subsecretaría del Sistema Penitenciario, de la Secretaría de Salud, a las y los compañeros de la Comisión, principalmente de la Segunda Visitaduría.

La Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF) tiene por objeto la protección, defensa, vigilancia y promoción de los derechos humanos de todas las personas que viven o transitan en la Ciudad de México, bajo los más altos estándares, nacionales e internacionales, en condiciones de igualdad, combatiendo en todo momento cualquier tipo de discriminación o exclusión que cause menoscabo a los derechos humanos protegidos.

A través de la Segunda Visitaduría General, la CDHDF tiene la tarea de vigilar que se garanticen los derechos humanos de las personas que se encuentran privadas de libertad en los centros de reclusión de la ciudad o que deben cumplir una sanción administrativa. Uno de los ejes de trabajo que ha asumido con especial compromiso es la protección del derecho a la salud de este grupo de población.

Es pertinente señalar que a nivel internacional, encontramos el reconocimiento del derecho a la salud en la Declaración Universal de Derechos Humanos, el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales, en la Convención Americana de Derechos Humanos y el Protocolo Adicional en materia de derechos Económicos, Sociales y Culturales; en el orden jurídico nacional este derecho se encuentra protegido en la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos y en la Ley General de Salud y en el ámbito local en la Ley de Salud del Distrito Federal.

Con base en ello, en el año 2011 la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, emitió el Informe especial sobre el derecho a la salud de las personas privadas de la libertad en los centros de reclusión del Distrito Federal 2010-2011, a fin de establecer un diagnóstico de la situación que prevalece en los centros de reclusión varoniles, femeniles y el centro de rehabilitación psicosocial, con respecto a la infraestructura, procedimientos y recursos humanos con los que cuentan los servicios de atención médica y se formularon algunas propuestas.

Con el fin de dar seguimiento a dichas propuestas, durante el año 2013 la Segunda Visitaduría implementó acciones de monitoreo y supervisión en las unidades médicas de los centros de reclusión y en el Centro de Sanciones Administrativas.

En 2014 continuaron las visitas de verificación en dichos establecimientos, en las cuales se entrevistó a la población privada de la libertad respecto de los servicios de salud que se prestan en los centros penitenciarios. Además se realizaron recorridos en las instalaciones de cada una de las unidades médicas para observar su infraestructura, los servicios que otorgan, el equipamiento con que cuentan, el personal médico y administrativo con el que operan, así como los procedimientos que llevan a cabo.

Como parte del cumplimiento a las propuestas del Informe, la Dirección de Servicios Médicos Legales y en Reclusorios de la Secretaria de Salud elaboró un diagnóstico sobre las necesidades de las unidades médicas y la Secretaría de Salud destinó un presupuesto especial para realizar  trabajos de mejora, remodelación y adecuación de sus espacios.

A continuación les presentamos el resultado de las  Acciones de Supervisión en Unidades Médicas en centros de reclusión y en el centro de sanciones administrativas del Distrito Federal 2014-2015.

En el costado izquierdo de la presentación encontraremos las imágenes recopiladas en el año 2013 de cómo se encontraban los espacios en donde se invirtió para su mejora o adecuación y, del lado contrario tendremos su situación actual.

Comenzamos con la Unidad Médica del Reclusorio Preventivo Varonil Norte. En ésta se remodeló el área de acceso, colocando muretes y renovando la cancelería, lo cual permite mayor organización para el ingreso de las personas que solicitan atención médica y para quienes acuden por medicamento, toda vez que se habilitó una ventanilla de entrega fuera de la Unidad.

Al interior del servicio médico, se rehabilitaron pisos, techos y paredes; en los baños de los pacientes se renovó el sistema de iluminación con luminarias, balastros y gabinetes nuevos; se colocaron lavabos y mingitorios y se sustituyeron los grifos y regaderas.

En el cuarto de rayos X también se renovó el sistema de iluminación y se instalaron negatoscopios en los consultorios, estos últimos se equiparon con mesas de exploración nuevas y además se construyeron y habilitaron dos consultorios para brindar consulta, situación que impacta en el aumento y mejora en la calidad de servicios médicos brindados a la población.

En el área de hospitalización encontramos también rehabilitados los pisos, techos y paredes, observando además de la iluminación, la colocación de películas en ventanas, lo cual posibilita garantizar privacidad a los pacientes.

Continuamos con la Unidad Médica del Reclusorio Preventivo Varonil Oriente, donde se dio mantenimiento a la cancelería de herrería y a los muretes del área de acceso, además de construir una ventanilla para recepción de medicamentos sin necesidad de acceder al servicio médico.

Se remodeló el área de recepción, situación que ha permitido mayor control y organización para la solicitud de atención médica por parte de la población; además se habilitaron dos espacios para toma de signos vitales y entrega de medicamento controlado y dos consultorios adicionales.

Los pisos, techos y paredes de la Unidad fueron rehabilitados en su totalidad; además se sustituyeron y repararon puertas en consultorios, en el área de hospitalización y en la oficina de enlace administrativo. Observamos también la ampliación del espacio que se utiliza para la farmacia. Además se sustituyeron los muebles en los sanitarios de los pacientes y se colocaron nuevos lavamanos y mingitorios.

Los baños y las regaderas también fueron rehabilitados en pisos, techos, paredes y accesorios, lo que hoy hace posible el óptimo funcionamiento de las instalaciones, las cuales se encuentran en mejores condiciones de funcionalidad e higiene.

Por lo que hace a la Unidad Médica del Reclusorio Preventivo Varonil Sur, se rehabilitaron pisos, techos y paredes, además del sistema de iluminación de las áreas de hospitalización, consultorios y rayos X.

Asimismo, se colocaron lavabos y mingitorios nuevos, además de sustituir los grifos y las regaderas.

Seguimos con la Unidad Médica ubicada en la Penitenciaría del Distrito Federal, donde se rehabilitaron pisos, techos y paredes de los consultorios y del área de hospitalización, además de colocar muros de concreto en los espacios donde se proporcionan servicios de atención médica.

Destacamos también la compra e instalación de dos tinacos y una cisterna que abastecen a la Unidad Médica de agua, lo que permite que no dependa del suministro del centro penitenciario; es importante destacar que esta área cuenta con una unidad de quirófano equipada, que aún no está en servicio, por lo que se espera que a la brevedad pueda ser utilizada para responder de mejor manera a las necesidades de la población de dicho centro.

Continuamos con la Unidad Médica del Centro Femenil de Reinserción Social Santa Martha Acatitla, en la cual por ser de reciente creación se realizaron trabajos de mejora menores, entre los que encontramos la separación física del área de consulta y exploración y la adecuación de la Central de Equipos y Esterilización.

Anterior a las acciones realizadas por este Organismo, el Centro de Sanciones Administrativas no contaba con un espacio idóneo para proporcionar servicios de atención médica; sin embargo, hoy cuenta con espacios habilitados e instrumental médico para proporcionar atención médica a la población que permanece en dicho centro.

Este Organismo reconoce la primera etapa de actividades desarrolladas por la Secretaria de Salud a fin de mejorar las condiciones de infraestructura de los servicios médicos, en la cual se dio prioridad a las unidades que más necesidades presentaban.

La CDHDF ha acompañado y seguirá acompañando estas actividades que contribuyen a fortalecer la labor de prevención que permitirá salvaguardar de mejor manera los derechos humanos de las personas privadas de libertad. Además, para que se establezca la coordinación necesaria entre la Secretaría de Salud y la Subsecretaría de Sistema Penitenciario para que estas acciones de mejoramiento y remodelación incluyan las áreas que dependen del sistema penitenciario, tomando consideración que dichas actividades impactarán de manera importante en la disponibilidad de los servicios de salud para las personas en situación de reclusión.

Por otra parte, la CDHDF reconoce la continuación de la Campaña de detección de diversos padecimientos que inició en el año 2014 y que hasta la fecha ha realizado pruebas de detección en los Reclusorios Preventivos Varoniles Norte y Oriente, así como en el Centro Femenil de Reinserción Social Santa Martha Acatitla y el Centro Varonil de Reinserción Social, las cuales se han realizado con la colaboración de los Servicios de Salud Pública, en particular con la entusiasta y comprometida participación de las y los trabajadores de las Jurisdicciones Sanitarias de Gustavo A. Madero e Iztapalapa.

En el mismo sentido, destacamos la coordinación de la Secretaría de Salud, la Clínica Especializada Condesa y la Subsecretaría de Sistema Penitenciario con este Organismo, para la elaboración y difusión del video documental educativo «Ponte a prueba II, porque el reto es tu salud”, el cual tiene como propósito promover la importancia de la prevención, diagnóstico oportuno y tratamiento médico en las cárceles de la Ciudad de México.

No obstante, y sin menoscabo de los avances que referimos, es importante señalar que la situación de que dio cuenta el diagnóstico realizado con motivo del Informe Especial está siendo atendida; sin embargo aún se plantean retos enormes a la Secretaría de Salud del Distrito Federal así como a la Subsecretaría de Sistema Penitenciario, por lo que hace a la coordinación que deben mantener de manera permanente, en el mejoramiento de los procedimientos y en la administración de los recursos materiales y humanos que permitan garantizar el goce efectivo del derecho a la salud las personas en situación de reclusión.

Otro pendiente es la necesidad de garantizar a las personas privadas de la libertad la cobertura en situación de igualdad y sin discriminación de los distintos niveles de atención, acción que deberá llevarse a cabo en coordinación con la Secretaría de Salud Federal, a fin de garantizar el acceso irrestricto de la población penitenciaria que requiera atención médica especializada que no pueda ser cubierta por la red de salud local, a los Hospitales e Institutos de la Federación, así como a los esquemas y políticas de garantía al derecho a la salud como lo es el Sistema de Protección Social en Salud (Seguro Popular).

En abono a lo anterior, destacamos la Sentencia emitida por el Juez Primero de Distrito en Materia Administrativa en el Distrito Federal, la cual determinó otorgar el máximo estándar de protección a la salud de una persona privada de la libertad en la Penitenciaría del Distrito Federal, al concederle la protección de la Justicia Federal y ordenar su afiliación al Sistema de Protección Social en Salud, lo que hizo posible que a la fecha el paciente reciba los ciclos de quimioterapia que requiere para atender su padecimiento sin tener que pagar de inmediato el costo elevado de su tratamiento.

Esta Comisión continuará el diálogo constante con las y los titulares de las instituciones médicas de tercer nivel, tratando de generar espacios para la atención de las personas privadas de la libertad en los centros de reclusión de esta ciudad e insistirá porque en un futuro cercano puedan acceder a los servicios que prestan, en condiciones de igualdad y sin que su condición de reclusión constituya un obstáculo para el ejercicio de su derecho a la protección de la salud.

Por otra parte, esta Comisión hace patente su preocupación por la falta de personal administrativo, médico y paramédico en las Unidades Médicas, el cual actualmente es insuficiente para atender las necesidades de salud de una población de aproximadamente 37 mil personas, por lo que exhorta a la Secretaría de Salud a que se lleven a cabo las acciones pertinentes para garantizar la disponibilidad de recursos humanos suficientes y una estructura orgánica que posibilite el acceso y uso de los servicios de salud.

Finalizo reiterando que la salud es un derecho fundamental e indispensable para el ejercicio de los demás derechos humanos, su ejercicio y goce efectivo constituye uno de los elementos que posibilita el fin último de las penas privativas de la libertad, por lo que es importante que quienes hoy nos encontramos en esta presentación, continuemos atendiendo y fortaleciendo los servicios de atención médica para las personas privadas de la libertad, en la búsqueda constante del más alto nivel de salud posible. Sobre todo, nuestro reconocimiento a las instancias, las autoridades, por la dignificación del espacio que merecen tanto los profesionales de la salud como las personas privadas de su libertad, que no pierden su derecho fundamental a la salud. Muchas gracias.

Inklusion
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