Discurso 11/2018
2 de marzo de 2018
A nombre de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México y en representación de la Federación Mexicana de Organismos Públicos de Derechos Humanos (FMOPDH), integrada por 33 instituciones me permito expresar (interrupción) … a iniciar un diálogo incluyente sobre la seguridad en México. El Congreso de la Unión y el Ejecutivo no escucharon a las 33 instituciones responsables de la promoción y defensa de los derechos humanos dentro del Estado mexicano.
La publicación de la Ley de Seguridad Interior es la muestra de una construcción no democrática de las políticas de seguridad en México y representa un retroceso, porque propone un modelo militarizado, contrario a una política de seguridad ciudadana. A la Federación nos preocupan las restricciones irrazonables y desproporcionadas de los derechos humanos, así como los riesgos de violaciones que se pueden desprender de la aplicación de esta Ley.
Esta Ley afecta la autonomía de los Organismos Públicos de Derechos Humanos, porque nos pueden exigir información de miles de víctimas de derechos humanos y, en caso de oponernos, pueden iniciar procesos de remoción de quienes presidimos estas instituciones, por ello, venimos ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para que solicite a la Corte Interamericana de Derechos Humanos (CoIDH) una Opinión Consultiva sobre la compatibilidad de las políticas de seguridad en la Región y las obligaciones que, en materia de derechos humanos, tienen los Estados Americanos.