Discurso 13/2018
6 de marzo de 2018
Me da mucho placer compartir con mujeres que admiro, con compañeras de trabajo, con gente con la que hacemos alianzas y hacemos alianzas para el desarrollo, desde diferentes campos de trabajo.
Me da mucho gusto que también, quienes están allá abajo, tendríamos que poner como 80 filitas, que también forman parte de este trabajo y de estas luchas, recordemos hoy, de principio, que hace todavía un Siglo, hablar de mujeres en lo público era hablar del pecado: hablar de mujeres en lo público era hablar de las mujeres de la calle, y estar en la calle para las mujeres era calificarnos, denostarnos y, básicamente, considerar de principio que estábamos en el lugar equivocado.
Hoy, un Siglo después, exactamente de lo que se trata, cuando hablamos de un Foro de Desarrollo y Paridad…, es de hablar de las mujeres en la calle, hablar de las mujeres en lo público, ¿con qué? Con el mismo orgullo y el mismo trabajo de construir históricamente, cuando hablamos de las mujeres en lo privado y de lo que somos, y de lo que somos para la historia de la humanidad, en ese ámbito, como lo somos también aquí, en la calle, en lo público.
Sean ustedes bienvenidas y bienvenidos a la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal, a este Foro del Desarrollo y Modelo de Paridad…, básicamente porque no podría haber desarrollo si no hay modelo de paridad, eso es un hecho, eso es la discusión, eso es la batalla cotidiana: este país, esta Ciudad, este mundo no puede avanzar en el desarrollo si no lo hace bajo el principio de la paridad, si no lo hacemos bajo el principio de mujeres educadas, empoderadas en su casa y en la calle, sobre todo en la calle, en lo público, que creciendo al igual que los hombres en ambos espacios, porque en ambos espacios estamos hombres mujeres o lo que nos queramos denominar.
Esta Comisión se siente muy honrada de contar esta maña con mujeres que han trabajado e inciden con su actividad en el sector público, para impulsar y lograr que se consolide el modelo de paridad, igualdad y no discriminación.
Sin duda, la incorporación de la perspectiva de género en el quehacer institucional enfrenta retos y desafíos; por tal motivo, resulta una gran oportunidad para abordar una agenda tan importante como la que tenemos a consideración en las mesas de trabajo y sobre las cuales podremos intercambiar puntos de vista, compartir, analizar y discutir temas de interés general para todas y todos, no solamente para mujeres este tipo de espacios significan un fortalecimiento en la vida de las instituciones públicas y privadas.
No sólo basta impulsar o alentar una multiplicidad de reformas legislativas para asegurar el principio de equidad de género, sino también la armonización e implementación, sobre todo, implementación cotidiana.
Las mujeres somos, a nivel mundial, 51% de la población; formamos parte esencial del género humano y tenemos tanta, la misma y a veces más capacidad que nuestros compañeros varones, para poder estar en esta agenda, para poder navegar y ser capitanes, en términos de lo que implica llevar a este mundo, a este país, a esta Ciudad, a otros rumbos.
Ser feminista, ser anti sexista forma parte esencial de los derechos humanos, hombres y mujeres debemos ser anti sexistas, así como somos anti racistas, anti discriminatorios.
Por eso, para la Comisión es un orgullo, en el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer, tenerlas a ustedes, tenerlos a ustedes, tenerlas a ustedes compañeras, trabajando, discutiendo, sobre un tema que todavía requiere no nada más de aspectos institucionales, sino sobre todo de aspectos culturales. Cuanto más cerca están del poder, menos mujeres encontrarás.
Hoy, en este presídium y con su presencia, estamos echando abajo esa premisa, porque estamos cerca del poder, todas nosotras estamos cerca del poder, y somos mujeres. Y cuando discutimos sobre paridad y desarrollo, estamos discutiendo eso, y además estamos entrando, y que nos quede claro, a la lucha por el poder; a la lucha por el poder, por el poder de decisión, por el poder de transitar, por el poder de caminar.
La verdadera nobleza es caminar toda la vida con pasos que salen del corazón, con actos que estén de acuerdo con nuestras ideas, aunque el precio sea alto, y a eso nos convoca este Foro…, a eso nos convoca nuestra vida, y por eso, esperamos que en este día y en el continuo, esta agenda sea una agenda que trabajemos, que discutamos, y que hagamos de manera cotidiana.
Quiero aprovechar, reconocer a la Magistrada Mónica Güicho, del Tribunal Federal de Conciliación y Arbitraje, por la organización de este encuentro, junto con Bibi y un grupo de equipos que nos estamos chateando todo el tiempo, empoderándonos por la vía…, por diferentes vías y por diferentes agendas.
Enhorabuena, y reitero que esta Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal tendrá y tiene las puertas abiertas para este tipo de iniciativas y seguir impulsando y colaborando con todas las actividades de educación, de formación, de sensibilización que tengan que ver exactamente con dar sostén y garantía a la inclusión de la perspectiva de equidad de género en la vida institucional y social y, sobre todo, a la perspectiva anti sexista en la vida cotidiana.
Muchísimas gracias. Bienvenidas y bienvenidos.