Discurso 76/2019
14 de agosto de 2019
Muy buenos días a todas, a todos y a todes. Gracias por la invitación a venir a presenciar lo que es el arranque de un diálogo y de mesas de trabajo técnicas para poder, como dice la convocatoria, poner cero, poner un alto a la impunidad y avanzar sobre la justicia absoluta de la violencia de género.
Los diagnósticos están dados, ninguno ni ninguna de las personas que estamos aquí podemos negar que la violencia de género es un fenómeno que invade y oscurece no nada más la vida de las mujeres de esta Ciudad, sino de este país y de, lamentablemente, la mayoría de los países del mundo.
Teniendo el diagnóstico ahí lo que hay que preponderar es cómo sumamos esfuerzos para poder exactamente revertir este fenómeno, que no nada más violenta en el momento a las mujeres, sino que impregna su vida completa, impregna no nada más sus proyectos de vida en el futuro, sino su proyecto de vida siempre en el presente y en el día a día.
Entonces no hay esfuerzo, además, o los esfuerzos que intentan acabar, que intentan erradicar, que intentan tener cero impunidad se construyen en colectivo, y esto es un ejemplo de lo que tenemos que estar haciendo para construir desde donde nos toca en colectivo.
En la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México lo que queremos es recibir a menos mujeres que por la vía de la violencia básicamente no nada más son violentadas, sino que son reviolentadas, porque quienes llegan ahí en la mayoría de los casos llegan porque no han alcanzado justicia.
Y en esta parte, la posición, y lo que queremos en la Comisión, es tener a menos mujeres que lleguen a la Comisión porque lo que no han alcanzado es justicia, en todas las ramas.
A la Comisión llegan desde violencia intrafamiliar, violencia sexual, violencia comunitaria, feminicidios, llega acoso, llegan estas figuras de repente muy naturalizadas de violencia que también requieren de una transformación no nada más de los sistemas, no nada más de los actores, que en la parte jurídica y en la parte de justicia están siendo los operadores para apoyar a estas víctimas.
Lo que queremos es que si ya fuiste víctima de violencia además no adiciones ser una víctima de violación a tus derechos humanos porque no tienes un debido proceso y una respuesta adecuada de las autoridades.
En ese sentido, naturalmente en la lógica de la Comisión con la nueva Constitución, lo que dice nuestra Ley de Derechos Humanos de la Ciudad, nuestra tarea es coadyuvar, esa es nuestra obligación constitucional. Coadyuvar a qué, a que las políticas públicas de la Ciudad estén enfocadas y tengan un enfoque de derechos; y en este caso cuando hablamos de violencia hacia las mujeres estamos hablando que tenemos que tener las tres perspectivas justas: la perspectiva de derechos humanos, la perspectiva de género y la perspectiva de interseccionalidad. Sin estas tres rutas no vamos a poder avanzar en lo que hoy nos convoca.
Me da muchísimo gusto y me permito decir que aquí está la convocatoria a quienes están aquí presentes, pero también ampliar la convocatoria a participar en esto que anunció la Procuradora que es el Plan de Atención a la Violencia Feminicida, una mesa de trabajo y trabajo articulado para generar esto, y a lo que es el Programa de Prevención de Atención, Sanción y Erradicación de la Violencia contra las Mujeres.
Ambos instrumentos que son los iniciales que se anuncian aquí son los fundamentales para tener por lo menos una base inicial para empezar a tener acciones, que como dijeron aquí, se tienen que demostrar en los hechos, en la cotidianidad y en el día a día.
Y entonces creo que vale la pena ampliar la convocatoria, vale la pena tener mesas de trabajo con una amplia convocatoria de las que están aquí, pero también de las que no están aquí, para construir estos instrumentos, estos instrumentos que permitan lo más pronto posible el poder transformar la vida de muchas de las mujeres de esta Ciudad y sobre todo poder manejar el riesgo.
Tenemos, y la parte focal de un programa de prevención, es que tengamos que tener una visión de prevención del riesgo de violencia a la que estamos expuestas, lamentablemente, la mayoría de las mujeres de la Ciudad.
En esa lógica creo que este tipo de iniciativas, el ampliar la convocatoria, el consolidar lo que ya había venido haciendo el Gobierno, nosotros hemos seguido con puntualidad la presencia de las abogadas en los Ministerios Públicos, la conformación de la red de mujeres contra la violencia en los barrios y colonias de la Ciudad, y creo que tendremos que avanzar en esas lógicas y con esta suma de instrumentos básicos avanzaremos muchísimo más.
Yo solamente quisiera agregar que finalmente la Comisión en este sentido apoya, acompaña y coadyuvará a las instituciones del Gobierno de esta Ciudad para que logremos todos, todas y todes juntos esto, que no es una tarea fácil, que implica, como también quienes me antecedieron en la palabra lo señalaron, un gran cambio cultural, un gran cambio de percepción, un cambio contra la normalidad y la normalización de la violencia, que también implica tiempos, implica procesos. Pero no porque estén ahí, no porque sean miradas a mediano y a largo plazo no tendremos que omitir que necesitamos cosas a corto plazo que se pueden hacer ya, y el estar aquí es una demostración a eso.
Entonces muchísimas gracias por la convocatoria y en esto la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México está sumada y está arriba de este tren que nos toca dirigir. Gracias.