Discurso 97/2019
28 de octubre de 2019
Bienvenidas a todas, todos y todes a esta Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México. Es un gusto contar con la presencia de Francisco Cervantes. Como dicen, atrás de aquí está el trabajo de muchas y muchos compañeros tanto de la Universidad como de la Comisión, en específico de la Dirección de Educación, a quienes especialmente agradezco el trabajo para llegar a estos primeros cinco cursos de 18 que tenemos programados, al menos y los que se acumulen.
Creo que estamos abriendo puertas también desde la Comisión y aquí es muy importante resaltar que nosotros somos un órgano defensor de derechos humanos y parte de la defensa es primordialmente la promoción y la educación, para exactamente la propia garantía y defensa de los derechos.
El empezar a trabajar con estos cursos lo que robustece y fortalece es la defensa y la garantía de los derechos humanos. El pensar en cómo los miran y cómo los ven, y cómo estamos formando personas o dando información que permita que puedan ser, como finalmente todos tendríamos que ser, como ciudadanos. Ser defensores de derechos humanos no nada más de nosotros, sino ser nuestros propios defensores.
Estamos ante una gran oportunidad, estamos hablando de una plataforma que va a estar activa los 365 días del año, las 24 horas. Los cursos son cortos de 20 horas. Es importante señalarlo para poder tener un largo alcance. Hay un target importante en términos de la comunidad universitaria, pero no nada más eso, más allá de la comunidad.
Nuestro trabajo también se ha venido desarrollando dentro de nuestra plataforma y naturalmente estamos fortaleciendo cómo utilizamos eso que estaba planteando Francisco, para tener mayor pertinencia en términos de la oferta que tenemos también desde acá.
Trabajar con la UNAM es un privilegio. Trabajar con una de las primeras plataformas que empezaron a hacer en este país todo lo que era educación a distancia y su acervo acumulado, es un privilegio tener acceso y coordinar este trabajo con ustedes.
Hoy estamos en la punta de lo que creo es la Tercera Etapa del Programa Mundial para la Educación en Derechos Humanos, estaos hablando de un acuerdo y una lógica internacional que está planteando que la lógica es por aquí. Que es el trabajo en educación y derechos humanos bajo los mecanismos que estamos planteando.
Vamos a empezar a estimular desde nuestras Delegaciones en las Alcaldías el que la gente se incorpore y trabaje sobre estos cursos; y los que vengan. Estamos en este sentido abriendo brecha a una lógica de trabajo que ya traíamos, pero que se verá fortalecida muchísimo con esta alianza que esperamos siga rindiendo frutos.
Para nosotros es muy importante tener una presentación pública, ya estábamos muy listos en la parte de arrancar, pero necesitamos una presentación pública porque lo que queremos es difundir, lo que queremos es que la gente tenga acceso a estos primeros cinco cursos y que después tenga acceso, no nada más los primeros 18, sino a muchos más. Nuestra apuesta es esta y qué más podemos desear, que sea de la mano de la UNAM.
Básicamente invitarlas e invitarlos a que accedan y entren ya a la plataforma, inviten y que utilicemos lo que ya está elaborado ahí. Como dices… parte de la cultura de los derechos tiene que ver fundamentalmente con un cambio de percepción cultural en la renovación de los principios éticos que tiene que ver con el respeto a los derechos humanos y entonces vamos a estar por ahí trabajando en esa lógica.
Volverle a dar las gracias a los equipos, gracias a la UNAM por la confianza del trabajo con nosotros.