Boletín 111/2024
11 de noviembre de 2024
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- De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición Continua 2023, en México 7 de cada 100 niñas, niños y adolescentes han pensado en el suicidio.
El fenómeno del suicidio en niñas, niños y adolescentes (NNyA) no es un hecho aislado ni una experiencia individual. Confluyen diversos factores de riesgo: escolares, familiares y sociales. Por este motivo, es fundamental garantizar su derecho a la salud física y mental, toda vez que está vinculado con el respeto y garantía de otros derechos.
Así lo destacó la Presidenta de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México (CDHCM), Nashieli Ramírez Hernández, durante la presentación del Informe Temático “Estrategia de prevención y atención del suicidio en las infancias”.
Indicó que el intento de suicidio en adolescentes es mayor que en población adulta de más de 45 años; y que la persistencia es cuatro veces mayor en las mujeres que en hombres.
El objetivo de este Informe Temático, dijo, fue desarrollar una estrategia dirigida a la atención y prevención del suicidio en infancias desde los enfoques comunitario, psicosocial, de género, en infancias y derechos humanos, con el fin de promover su bienestar psicosocial y favorecer su salud mental.
Explicó que el antecedente de dicha estrategia fue la Consulta “Violencia entre pares” -llevada a cabo por este Organismo en 2023 y 2024-, donde infancias de primarias y secundarias de la Ciudad de México expresaron que uno de los impactos psicosociales más graves es el suicidio.
Se abordaron temáticas como la salud mental, sentimientos y emociones; factores de riesgo (sociales, violencia y muerte); elementos de protección (familia, maestras y maestros); así como acciones para garantizar su salud mental de parte de las y los responsables de crianza (cuidados, platicar y atención).
Entre los hallazgos, NNyA expresaron la importancia de sentirse escuchados por docentes y cuidadores, especialmente cuando viven situaciones de pérdida, estrés, violencia, entre otras, ya sea que las vivan en casa o la escuela: “Se pueden identificar señales previas. Hay avisos y lo que tenemos que aprender es cómo descifrarlos. No es algo que venga de un momento a otro”.
Respecto a las personas adultas, Ramírez Hernández señaló que son más reticentes que NNyA para conversar abiertamente sobre el suicidio. Las y los docentes reconocen la importancia de contar con más información sobre cómo actuar y a quién dirigirse para atender los casos que observan.
La Ombudsperson capitalina sostuvo que un factor determinante para el bienestar integral de las infancias se relaciona con la importancia de sentir que son valoradas por sus habilidades, cualidades y/o características de su personalidad, así como que tengan información clara respecto de cómo funcionan los servicios de salud mental.
En su oportunidad, el Titular de la Autoridad Educativa Federal de la Ciudad de México, Francisco Luciano Concheiro Bórquez, celebró el Informe Temático porque es la posibilidad de un mejor presente y futuro para la niñez ante un tema delicado como el suicidio.
Destacó que de acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición Continua 2023 del Instituto Nacional de Salud Pública, el número de niñas, niños y adolescentes de 14 a 19 años que presentaron algún síntoma depresivo aumentó considerablemente; además que reveló que 7.6% de la población infantil y adolescente alguna vez pensó en el suicidio.
Manifestó que la Autoridad Educativa Federal y las secretarías de Educación, Salud y Bienestar del Gobierno capitalino unirán esfuerzos para la consolidación de los entornos escolares para alcanzar lugares seguros y óptimos para el desarrollo de las infancias y adolescencias; así como para generar campañas de sensibilización.
A su vez, la Secretaria del Bienestar e Igualdad Social de la Ciudad de México, Araceli Damián González, expresó que el suicidio infantil es un tema doloroso, el cual demuestra que la sociedad mexicana ha fallado en brindar protección a la niñez.
Resaltó que el Gobierno capitalino impulsa la estrategia del Sistema Público de Cuidados dentro de las unidades UTOPÍAS, ya que las infancias tienen que ser el centro del cuidado. La responsabilidad también la tiene el Estado y no sólo las familias.
Damián González lamentó los prejuicios sociales frente a las enfermedades mentales y se pronunció por superar la estigmatización hacia las infancias y adolescencias.
La Presidenta de la Comisión de Derechos Humanos del Congreso de la Ciudad de México, Jannete Elizabeth Guerrero Maya, destacó que este Informe Temático debe llevar a actuar de manera urgente, desde la colaboración interinstitucional para su intervención.
El suicidio, dijo, es un reflejo de las condiciones sociales, económicas y culturales que rodean a niñas, niños y adolescentes; aunado a factores como la violencia escolar, discriminación, pobreza y falta de acceso a servicios de salud.
Por ese motivo, apuntó, las infancias requieren ser atendidas desde un enfoque multifactorial: “Tenemos en nuestras manos la posibilidad de hacer una diferencia real. El Informe debe ser el punto de partida para una agenda legislativa que priorice su salud mental”.
La representante de la Comisión Nacional de Salud Mental y Adicciones (CONASAMA), Lucia Amelia Ledesma Torres, refrendó el compromiso institucional de continuar el trabajo a la atención y prevención del suicidio desde la Dirección General de Políticas Públicas en Salud Mental y desde el programa nacional en esta materia.
Llamó la atención sobre el incremento del “suicido consumado” en los distintos grupos etarios, fenómeno que ocurre en todo el mundo, relacionado en la pandemia y posterior a ella.
Indicó que en hospitales generales aumentó la atención de urgencias a personas menores de 18 años por intentos de suicidios o de salud mental, lo cual arroja señales de alarma que requieren atención desde los diversos ámbitos institucionales.
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